Por Miguel Díaz Román
El desempeño del Departamento de Agricultura como promotor y custodio de la actividad agrícola en el país ha salido trasquilado según la evaluación efectuada por los propios agricultores locales, de acuerdo con los resultados del “Estudio sobre el Perfil del Agricultor Puertorriqueño” realizado por el Instituto de Estadísticas de Puerto Rico (IEPR).
Según el estudio, el 74 % de los agricultores que respondieron el cuestionario electrónico que se utilizó como fuente principal de información, sostuvieron que no habían recibido apoyo económico por parte del gobierno local. Mientras que el 85% indicó que no recibió apoyo de la empresa privada.
De hecho, el estudio indica que solo un 26% de los agricultores recibió ayuda económica de parte del gobierno.
El estudio se realizó entre el pasado 30 de mayo y el 27 de junio de 2023. Fundamentalmente, las preguntas iban dirigidas a identificar los problemas enfrentados por los agricultores entre los años 2020 y 2021.
El cuestionario electrónico fue contestado por 160 agricultores que enviaron sus respuestas, pero el IEPR entendió que solo 108 de los cuestionarios atendidos por los agricultores eran válidos, lo que representa una exigua muestra del universo de los agricultores. Además, esa muestra es el 68 % del total de los agricultores que respondieron el cuestionario.
De hecho, una parte significativa de los agricultores no son muy diestros en el uso de la internet, lo que pudo afectar la representatividad de la muestra, debido a que para acceder al cuestionario era necesario entrar a la plataforma SurveyMonkey.
Un elemento que podría contribuir a cuestionar la validez representativa de la muestra es que el estudio sostiene que el 65 % de los agricultores que participaron tiene un grado universitario, lo cual no es la situación real del sector agrícola. Según el estudio, el 35 % de los agricultores dijo tener un bachillerato, un 25 % maestría y un 5% doctorado.
Además, el 46 % de los agricultores que respondieron al cuestionario tiene entre 50 años y más de 65 años, mientras que el 66% de los agricultores que respondieron al cuestionario se identificó como hombre, mientras que el 34% se identificó como mujer.
Otro elemento a considerar es que el 85 % de los participantes del estudio se identificó como agricultor, mientras que un 14 % se identificó como ganadero y el 1 % como otros.
Sin incentivos del gobierno
Un hallazgo significativo es que el estudio preguntó los métodos que utiliza el agricultor para vender o distribuir su producción, a lo que un 60% de los agricultores respondieron que venden o distribuyen directamente su producción al consumidor.
Un 30% indicó vender o distribuir sus productos en otras fincas, un 29% indicó que utiliza una distribuidora de alimentos, un 21 % dijo vender directamente a los supermercados y un 9 % a determinadas empacadoras.
Según el estudio, el 53 % de los agricultores indicó que no recibió incentivos o apoyo económico del gobierno a causa de un desastre natural.
Cuando se le presentó una terna para que identificara los servicios o apoyo que habían recibido, el 53 % de los agricultores indicó que no recibió ningún apoyo o servicios para la compra de maquinaria, compra de materiales, alquiler de maquinaria, alguna asistencia técnica, crédito o financiamiento, obtención de un seguro, comercialización ni procesamiento o transformación de sus productos.
Del estudio también se desprende que para el 73 % de los agricultores los altos costos de materiales fue su principal problema. Otro hallazgo es que el 31% de los agricultores identificó como su principal problema las dificultades para la comercialización de sus productos.
Además, un 59% de los agricultores alegó que enfrentó dificultades por falta de empleados y el 54% indicó que tuvo problemas en su negocio a causa de eventos climáticos.
Fondos federales agrícolas
A los agricultores también se les preguntó cuál había sido su experiencia o dificultad si habían acudido al Departamento de Agricultura (DA).
El estudio indica que solo 68 % de los agricultores respondieron a esa pregunta. No obstante, el estudio no presentó una relación numérica en cifras para cuantificar las respuestas. El estudio indica que la más alta proporción de los agricultores respondió que habían enfrentado problemas para recibir los servicios en el DA. Una proporción menor expresó no haber encontrado ninguna dificultad al acudir al DA.
Además, a los agricultores se les preguntó si recibieron incentivos o apoyo económico de parte del gobierno federal a causa de algún desastre natural o de la pandemia. El 47% de los agricultores indicó haber recibido algún incentivo o apoyo económico por parte del gobierno federal por un desastre natural.
Un 40% de los agricultores indicó haber recibido algún incentivo o apoyo económico por parte del gobierno federal por el evento de la pandemia. Mientras que el 53% de los agricultores indicó que no recibió del gobierno federal incentivos o apoyo económico por un desastre natural y un 60% por causa de la pandemia.
Otro hallazgo es que el 50 % de los agricultores cambió de cultivo en los últimos cinco años por problemas de producción, mientras que el 54 % de los encuestados indicó que los eventos climáticos causaron problemas a su negocio y el 64 % de los agricultores dijo que la mayor causa de sus pérdidas fue por el efecto de huracanes.
Presentan discrepancia
El estudio cobija el último año del pasado cuatrienio en el que fue secretario de Agricultura, Carlos Flores Ortega, y el primer año del secretario Ramón González Beiró.
Sobre los resultados del estudio Flores Ortega dijo “Discrepo sobre los incentivos. Entre 2018, 2019 y 2020 se distribuyeron en ayudas $240 millones entre fondos locales y federales, sin incluir $10 millones para placas solares y $15 millones en obras de infraestructura. Nada más en café el pasado cuatrienio se dieron millones de arbolitos y se aumentó a $100 la orden de abono por producción de café (que ahora la bajaron a $60 y nadie se ha quejado). Eso sin contar los proyectos de Agro Solar, Ley 118 y demás. Y del gobierno federal les dieron lo que no valían las fincas”.
El secretario González Beiró no respondió a la solicitud de una reacción de parte de este periodista.
A final del estudio se incluyen una serie de expresiones escritas de los agricultores que traslucen las percepciones negativas que estos albergan sobre el desempeño del DA y de lo que podría ser la iniciativa ReGrow, un programa de ayuda para los agricultores que comenzó con cerca de $95 millones asignados por el gobierno federal y que ha padecido desde 2021 una serie de problemas para que los fondos lleguen al bolsillo de los agricultores.
Exigen más efectividad al DA
”Necesitamos agilidad para poder obtener los incentivos y ayudas que son otorgadas exclusivamente para los agricultores. Llevamos años a la espera de las ayudas que nos corresponden. Se nos sigue afectando la cadena de producción al continuar en la espera de dichas ayudas. Además, la burocracia en las oficinas locales nos sigue atrasando. Por otro lado, las oficinas regionales no están realizando las labores que les corresponden, tampoco están compartiendo la información de ayudas en incentivos a todos los agricultores, sólo a unos pocos”, sostuvo uno de los agricultores.
Otro de los participantes planteó que “en estos últimos años he tomado cursos, seminarios y talleres para mejorar en las técnicas utilizadas, pero necesitamos más ayuda. Creo que Puerto Rico es un país que podría ser sustentable, debemos poner nuestro granito de arena y mejorar el campo de la agricultura.”
”Estamos en la mala, produciendo sin ayudas económicas y mucho menos mano de obra. Estamos haciendo lo que podemos en contra de todo el aparato del estado para proteger, regenerar el suelo y sacar alimentos sanos libres de pesticidas y otros agroquímicos, nos veremos en la raya.”, escribió otro de los participantes.
Finalmente se presentan expresiones como estas: ”Los agricultores necesitan al Departamento de Agricultura, sin esta alianza no habrá agricultura en 10 años en Puerto Rico”; ”El Departamento de Agricultura debe ser más efectivo con el agricultor, visitarlo, asistirlo y usar el mejor recurso” y ”Varios problemas con la Corporación de Seguros Agrícolas, al momento de pagar por los daños no son conscientes con el agricultor por los daños de los cultivos.”